Carmen estaba frente al espejo, perfeccionando el delineado de sus ojos con la precisión de una cirujana, cuando su móvil vibró sobre la mesa. Lo ignoró. Esa era su hora…
Mi hija, Naty, tiene cinco años. Es adorable, curiosa y, a veces, sus preguntas me dejan en situaciones en las que no sé si reír o esconderme en el baño…
Hubo una época en la que los miércoles por la noche eran sagrados. A las ocho en punto, los cinco nos reuníamos en el mismo bar de siempre. Estaba muy…